Carta al PRI

Nuestra mesa de manifiesto se ha encargado de realizar una serie de cartas a diversos participantes en nuestra presente situación política actual. Televisa, Milenio, el PRI... nadie se salva. Esta vez la carta va dirigida al partido que tanto daño ha hecho a México desde hace más de 80 años.

7 de Julio de 2012

A los miembros del Partido Revolucionario Institucional:

Los ciudadanos inconformes, que luchamos a favor de una democracia real, nos manifestamos mediante esta carta, porque sabemos que su partido ha representado la traición, la imposición, el autoritarismo, la corrupción generalizada; porque mantuvo una dictadura a sangre y fuego durante más de 70 años en los que se sometió la voluntad del pueblo a sus intereses más mezquinos, violando sistemáticamente los derechos fundamentales suscritos en la Constitución, como la libertad de expresión, asociación e información.

Enrique Peña Nieto y Aristóteles Sandoval son unos sinvergüenzas que se presentan como un nuevo PRI, pero que han operado al estilo del viejo régimen durante el proceso electoral del 2012. Ejemplos de ello han sido la complicidad con los medios de comunicación, con empresas nacionales e internacionales; de igual forma, la coacción y compra de voto, la represión, el excesivo gasto de campaña, no sólo utilizando recursos del erario público sino también dinero de dudosa procedencia, todo esto solapado por el IFE. Observamos durante la jornada electoral el acarreo de gente, quema de urnas, asesinatos, y toda clase de actividades fraudulentas que ustedes conocen bastante bien, a pesar de la mentira y el cinismo con el que han negado todo esto.

Acusamos a su partido de lucrar con el hambre y la pobreza, con la ignorancia y la manipulación de la información para su propio beneficio, de presionar y amenazar a la prensa libre y a los luchadores sociales, de implantar y dar continuidad a un sistema corporativista y neoliberal que sólo ha servido para enriquecer a unos cuantos, provocando con ello el empobrecimiento, abandono y marginación del pueblo.

Ustedes quieren un país sometido y dócil, un país de telenovela; quieren un futuro basado en las prácticas del pasado, pero deberán recordar que no representan la voluntad de la mayoría de los mexicanos. Nosotros queremos un México democrático, igualitario y en paz, que forje su futuro luchando en el presente; seguiremos exigiendo el respeto a nuestros derechos, lucharemos por ello cueste lo que cueste, porque estamos hartos de ustedes y porque no hay nada más digno que vivir y morir por la verdad, la justicia y la libertad.

NO A LA IMPOSICIÓN.